sábado, 28 de febrero de 2009

Tu promesa, mi promesa

Una promesa evade mis verdades mas siniestras.
Me encuentro solo, desesperado y sin salida.
Veo un dejo de luz entre miles de sombras.
Tu sabiduría inunda mis pechorias.

Segundo en la meta.
Prometo correr mas rápido.
Mi cabeza vacía.
De dolor y de tristeza.

Segundo en la meta.
Veo mi cabeza.
Inclinarse de bajeza.

Aquella promesa siniestra.
Evade mis respuestas.
Sobre aquella vez.
Que inclinaste tu cabeza.

Un gato negro en el tejado.
Anuncia cuervos revoloteando.
Signos de terror.
Aquella promesa siniestra.
Evade mis respuestas.
Benévolo pergamino.
De dolor y de tristeza.

Anuncia terror. Gato negro.
Anuncia tristeza.
De saber que te vas.
Enterrando tu promesa.

Renzo Rubén Anconetani

lunes, 23 de febrero de 2009

Llueve en mi mente

Como gotas caen sobre mi espalda,
llueve fuerte sobre mi mente.
No hace falta verlas caer,
solo quiero sentirlas llover.

Palpitan como aquel nombre que jamas olvidare.
Se sienten como ese perfume que nunca mas tendré.
Pero repican en mi mente,
como aquel ángel que dices ser.

No veo verte volver,
no veo verte caer.
Pero te veo en mi mente,
tan oscura como la noche,
tan fría como la nieve.
Hielo es mi corazón.
Sangre vuelve, late otra vez.

Y despierto en madrugada,
viendo fuerte llover.
Tras pensamientos ajenos,
que invaden mi ser.

Te sueño y soñare,
mi dulce ángel,
que dices ser.

Renzo Rubén Anconetani